Nada ... de nada ... cero patatero ... no se nos ocurre nada que contar ... estamos esperando ... ¿esperando qué? ... que la vida pase ...
Todos los días vamos a trabajar ... trabajamos mucho ... y volvemos a casa ... a veces (yo muchas veces) trabajamos en casa ... pasamos un rato juntos, dormimos y vuelta a empezar ...
Parece que después de la firma con la ECAI el tiempo ha vuelto a detenerse ... menos mal que la semana que viene será diferente, el próximo jueves y el siguiente tenemos dos de los tres obradoiros (talleres) previaje con Addis Galicia ... y probablemente nos dirán por dónde anda ya nuestro expediente ... seguro todo esto vuelva a acelerarnos el pulso y a hacer volar mariposas en el estómago, ... hasta ese momento ... a esperar ...
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Hola Paloma! Esto es que debe haber momentos para todo... Para la euforia por las fechas señaladas, la desesperación porque el tiempo no pasa y de simple pasar los días hasta que llega la próxima fecha... Pero, por lo que leo, sí que se mueven cosas, no? este fin de semana, de talleres, podreis compartir con otros papis y mamis todo vuestro proceso y zambulliros de nuevo como papis adoptivos... Disfrutadlo mucho, para cuando lleguen estos otros días "de poco"...
ResponderEliminarUn abrazo,
mariajo
La verdad Paloma que cuando estamos esperando toda nuestra vida se va al rededor de un teléfono ,una llamada que te lleve a Etiopia ,pero Paloma de veras te lo digo disfruta ahora de todo lo que te rodea aprovecha y has esas cosas que te apetecen y vive cada momento .Porq después todo es el enanao y no tendras tiempo ni para depilarte.
ResponderEliminara veces non ter nada que contar é a mellor das noticias. Nestes tempos que vos esperan de dura incertidume e tempo lento...¡¡¡alédome de que non teñades cousa que contar!!!.
ResponderEliminarBicos.
Lucía.
Hola!! Aunque sólo nos digas que no tienes nada que contar, ya nos estás contando algo; y decir tú que no tienes nada que contar... como que ya es un poco difícil de creer. De todos modos aprovecha este tiempito que te queda de "no hacer nada" más que la rutina diaria, porque ya verás qué prontito te vas a olvidar de esta etapa de la vida, y cómo habrá algún momento en que la eches de menos. Si yo te contara qué últimas 24 horas llevo... Pero vete preparando las canciones, los cuentos... y a aprovechar los poquitos minutos que quedarán por ahí sueltos para sacarles el máximo rendimiento. Cada día que pasa es uno menos de espera, y ahora ya está a puertas. Sigue manteniéndonos informados.
ResponderEliminarUn abrazo!!!
Por cierto, ya os puedo escuchar.Y llevo toda la tarde con esta música de fondo; y no sabes que punto de relax le da a mi "garito".Un besito que me marcho.
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